lunes, 16 de junio de 2008

Un lunes cualquiera

Hoy tengo el bloqueo del escritor. Soy incapaz de contar nada que sea medianamente serio. Voy dándole vueltas a tres o cuatro temas sobre los que escribir, pero no me sale nada que sea digno de ser contado. Parece, que lo que realmente me apetece es contar que no me apetece contar nada. Puede que lo que pase es que después de tres meses contando miserias, alegrías, tonterías, cosas serias y gilipolleces sin sentido, finalmente se me haya secado el cerebro y no pueda escribir nada.

Puede que haya contado todo lo que hay que contar, que no tenga humor para decir nada, puede que lo que me quede por contar sea algo que no se pueda contar en publico, también puede ser que me apetezca rellenar esta entrada contando que no me apetece escribir, lo que se me ha ido ocurriendo según lo iba contando, y desde luego me parece una idea divertida.

Pero también puede ser que si pasas el fin de semana de viaje, visitando las fiestas de una ciudad/pueblo, Soria, pasando el domingo entero en una pradera, en lo que dirían que es un macrobotellón si lo dijesen en el telediario de Tele 5, pero que, si lo ves de cerca, es realmente una fiesta tradicional que ha evolucionado sin pasar por el filtro de lo políticamente correcto y lo cool.

La verdad es que debería escribir sobre estas fiestas, pero si te faltan horas de sueño, es complicado explicar nada complicado. Así que lo dejamos para después de la siesta.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No fastidies!!! Mis amigas han estado ahí!!!! Bueno, igual no. Ya preguntaré exactamente, porque lo tuyo me suena a lo de la pradera y los toros que soltaban... y mis amigas de toros no han hablado... pero chico, coincide!!! A ver si el finde que viene te pasas por Zaragoza y nos vemos. Tengo un montón de cosas que contarte!!!!

Un besazo,

Gema