Los 31 se acabarón. Después vinieron los 32 y de pronto, en mitad de los 33, la crisis se acabó. Y las ganas de contar todo fueron disminuyendo. A veces, sólo a veces... vuelven... y hay que guardar este sitio para poder contarlo.
domingo, 9 de noviembre de 2008
Veo un perro azul
Si te dices a ti mismo que ves un perro azul, y lo repites continuamente, por mucho que te empeñes en intentar ver hipopotamos amarillos sólo vas ser capaz de ver perros azules.
Deja de buscar perros azules y dedicate a ver lo que hay alrededor tuyo.
5 comentarios:
y gracias
¿No era el gran oso blanco?
No. Era un perro azul, como el que hay a mi lado ahora mismo.
¿Que fumas ahora?
Yo no fumo.
Deberías saberlo.
A lo sumo como pasteles envenenados.
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